1 de cada 5 buques portacontenedores en todo el mundo está atrapado esperando fuera de los puertos congestionados. Decenas de ciudades chinas se encuentran estos días bajo confinamientos parciales o totales, después de un nuevo auge en casos de coronavirus en el gigante asiático que amenazan la controvertida estrategia de «covid cero» de las autoridades.
Debido a la propagación de la variante ómicron, Shanghái, con 25 millones de habitantes y un peso vital para la economía del país, sufre la peor ola desde la originada en Wuhan hace más de dos años. Al observar el panorama mundial, entre el 12 y el 13 de abril de 2022, 1,826 buques portacontenedores esperaban fuera de los puertos de todo el mundo. Sin embargo, el confinamiento al que está sometida la ciudad dificulta la llegada de los camiones que tienen que llevarse las mercancías por carretera o distribuirlas a las fábricas cercanas. Muchas, como la de Volkswagen o Tesla tuvieron que parar sus actividades.
Varios de los expertos consultados creen que teniendo en cuenta la importancia del puerto de Shanghái para el comercio de China, es poco probable que las restricciones duren mucho tiempo. Y que el Gobierno haga lo posible por volver a la normalidad lo antes posible.